martes, 25 de noviembre de 2014


Esta vez camina fuera de las hojas, de los ojos, de los parpados pegado y el corazón de cortaviento.
Los colores ya están aprendidos, los matices no se repiten jamas, aun todo es nuevo y hasta lo viejo sabe a nuevo....hoy mira justo al borde de la profundidad en los ojos, justo al borde no mas allá.... Puede que se encuentre la calma cuando sabemos que es solo momentánea.
Hoy lejos de casa dibuja paisajes con los colores que trajo de Maipu, con su aroma y el viento que guardo en el pelo y en sus ropas, también con su color sol, que cálido pone todo, puede que por eso se este perdiendo tanto en el girasol que encontró cerca de la fría cordillera.
se sacaría el corazón para decirle un par de cosas, para gritarle lo sucio y putrefacto que esta por la extrema fuente de calor, por la delicadeza en su sentir, por las vergonzosas lagrimas que provoca, lo sacaría de las entrañas para rajarlo cabernicolamente hasta llegar a su propio corazón ahí en lo mas profundo, para luego derrumbar cada bloque de emoción, cada puto centímetro de entrega, cada minuto mirando pupilas sin sentido, cada capacidad de callar al mundo completo para dejar escuchar los latidos de un extraño, cada ladrillo suelto por catástrofes no tan naturales, cada pétalo que en mariposas se convertían. luego con un escupo sellaría el vacío. un segundo escupo por si fuera necesario y un tercero para recordar el mal rato y que no se olvide nunca.
hoy los ojos pesan tanto que se quedan hundidos en almohadas nuevas, ya no tan nuevas, impregnándose de calor a cada suspiro, en cada segundo de despoje, en cada puntada al coser cada desastre en la bomba de sangre. la cual ya no derramara ni una sola gota mas .


Su nombre es Pedro,...sí se llamó Pedro lo llamaron Pedro y significa PIEDRA .