Las piedras se formaron mis enemigas, y es por eso que las pateo al caminar, mientras sus amigas hojas con temor caminaban a mi lado, mis ojos perdidos por el sabor de mi garganta, los colores eran perfectos, sus ojos se extrañaban con locura, ahora que ya no existe un nosotros el destino se ve mas débil y menos marcado, mi corazón se formo de colores que no me gustan, mis ojos no consiguen el brillo de siempre, aun que su amor completamente entero permanecerá en mis memorias en casilleros de mármol en mi cabeza. La gente con tonos amables me dicen que estoy loco y yo que mas puedo hacer que reírme ante tan vulgar demostración de falta de vida, nada mas que reír y decir que soy así, que mi mente se ha ido alterando con los años pasados, que mis ojos tomaron fuerza después de tanto derramar debilidad, que ya no me hace mal lo que antes me mataba, que aprecio aun mas los colores por que mi mente se altero por la naturaleza, que de tantas carreteras observadas sin movimiento facial, aumente mi necesidad de detalles, y si ahora la vida quisiera entregarme tesoros diría que no, que aun no me siento bien, que pretendo aprender mas, que mis errores aun me pesan y que mi espalda quiere descanso por largos años y para eso necesito aprender de ella, de la vida, de sus trampas, de sus juegos, de sus escondites, de sus palabras sucias, de las sombras de la noche y del día, aun me falta y si ahora parezco un loco quizá que pareceré en un montón de años mas.
Y si pasara largos momentos pensando en lo que podría haber dicho o hecho en el pasado mi pelo se caería por desilusiones, por los malos actos, por las dudas que quedan en las conversaciones, por que muchas veces cuestione mi forma de pensar, mi cuerpo, mi alma, mi familia, mi hogar, mis amigos, mi olor, los colores de mi vehículo de vida, entonces dicho esto no queda mas que vivir, aprender y respirar para aclarar ideas. Y prometí amar hasta el final de los tiempos, y caminar con frente en alto mientras aun sienta que existe en un rincón, ahí donde lo deje en mantención y se cansaron de remodelar, ahí como una ruina mas protegida por el gobierno, como si fuera un tesoro que solo ante los ojos de los ciegos se puede mirar y sentir.
Y la canción los Ratones de Evelyn Cornejo no dejaba de sonar en el laberinto de soluciones, por que sí me siento estúpido, y se que los colores que dejó en mí se ven mas opacos y el sol los desgasta y el brillo ya ni se aprecia pero aun los recuerdo en su gran magnitud y como en los primeros días es que mi mente tiene capacidad para vivir en una ilusión por que la gracia esta en eso en creer en vivir y aprender, por que lagrimas derramadas con dolor te enseñan a poder volar por donde mas te guste por lugares hermosos y así vivir mas tranquilo y feliz, nadie comprende y parecería un desquiciado si gritara mis ideas por las ventanas donde mis cuerpo se acomoda en lugares ajenos y es con algunos que puedo compartir mis palabras y no recibir una mirada que me diga que soy un demente que realmente entienden por lo que paso y de la forma sana que estoy actuando que soy fiel a mis pensamientos y palabras.
Y si realmente es amor, de los posos putrefactos y olvidados renacerá y formara colores mas maduros que devolverán brillos a los ojos de los espectadores, que entregara sonrisas y luces en las frentes, que cortaran las cadenas de mi mundo y del mundo de el, que por ahora se encuentran a muchos quilómetros desérticos de distancia, por ahora, y quedara escrito que marque mis huellas en busca de lo real, en busca de lo mejor y se contara que la fraternidad, lealtad, fidelidad, ímpetu, y tranquilidad tomaron mis manos cuando caía por el calor y la falta de agua, cuando mis ojos se cerraban por el casación y mis piernas con movimientos inertes me demostraban la fuerza en mi cuerpo, ahí realmente sabré todo, cuando llegue a sus ojos dormidos y cansados por la espera omitida, ahí me demostraran que es amor del que por muchos años profese.
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