
Se trata de un viajero el cual no perdura mirando las mismas paredes, su necesidad es el viento fresco, el despeinar cariñoso, sonidos bajos. Y como de la nada, sus criaturas fueron jugando algo que no estaba proyectado, nada esperado, ni mucho menos pensado. las palabras salen sucias y con poca fluidez, no se comprende el por que de lo que paso, es solo que sus emociones tomaron importancia y toda la energía se centro en la pena, para sanarla y liberarla, para acariciarla y volverla libre, es por eso que su cuerpo esta enfermo, y no es comprensible a los oídos de los enclaustrados, locura gritando del ultimo piso no saben que el sonido no llega a la tierra desde esa mirada tan alta, tan engañosa y falta de respeto.
Las personas pierden el tiempo en manejar o tratar de manejar las emociones de los demás y es como si les entregáramos una pauta de como hacernos sentir mal, de como llegar al punto donde mas duele, por eso es mi defensa, el escudo de hiedra que llevo perfumado, perder el tiempo en eso, eso si es locura, locura de falta de auto cuidado, de poca entrega con lo personal, de valentía de hablar, de decir lo sentido, de amar y regirse por ello, es la forma que se enfrentan las cosas, aun sin manifestar lo poco experimentado, no permitir que la maldad que sale de las palabras de los desastroso derrumba la torre en la cual trabajamos para llegar hasta donde veamos mejor, alcanzar la panorámica que deseamos es lo que tiene valides. Hoy tome un día libre, un día de somnolencia, de extrañar, de falta de ritmo y de música suave.